Es innegable que nuestra vida avanza de la mano del amor y que la verdadera belleza está en el interior de las personas, en su forma de ser. Pero, tampoco podemos negar que todos los días dedicamos tiempo y esfuerzo para mostrarnos atrayentes para los otros. Nos apertrechamos de prendas de vestir, perfumes, actitudes y cortes de cabello que esperamos con fe nos conviertan en la fruta del deseo de aquellos seres que nos atraen… y de los que no también.
“La sonrisa es el cosmético natural más efectivo para potenciar tu belleza física”
Es por ello, que nunca despreciamos, ni pasamos por alto, un consejo que pueda mejorar nuestra capacidad de atraer al sexo opuesto; más si provienen de un campo tan serio como la ciencia. Así que pongan mucha atención a estas cuatro recomendaciones que nos brida la versión electrónica de la revista Pijama Surf para hacernos más suculentos en el campo del amor y la pasión:
- 1. Sonreír siempre. “La sonrisa es el cosmético natural más efectivo para potenciar tu belleza física”. Hacerlo con la mayor sinceridad tiene un impacto inmediato sobre otras personas. Un estudio titulado “Integrating Gaze Direction and Expression in Preferences for Attractive Faces” , sostiene que la gente considera mucho más atractivas a personas que sonríen que a quienes no y que la felicidad es la cualidad más valorada por los otros.
- 2. Hombres, mentón arriba; mujeres, mentón abajo. Nuca hay dos oportunidades para dar una buena primera impresión. La psicología evolucionista sostiene que “en los hombres esta impresión es mucho más favorecedora si se muestran con el mentón en alto”, ya que esto disminuye el dimorfismo natural del rostro y aumenta la masculinidad. En el caso de las damas, solo es necesario bajar la barbilla para lucir más femenina.
- 3. Cuidar el tono de la voz. La voz gruesa y dominante en los hombres es asociada instintivamente por el sexo opuesto con su capacidad para reproducirse. Por su parte, a las mujeres les favorece un tono más sensual y femenino, el cual es usado comúnmente para neutralizar a las futuras competidoras.
- 4. Cuestión de altura. En el pasado la altura y la corpulencia era índices de superioridad y, por ende, de éxito sexual. Pero, hoy la altura se mide en otros términos, como logros personales, dinero o prestigio. Esta sensación de altura ficticia hace a los hombres más deseados. Las mujeres por su parte siempre se han apoyado en la vulnerabilidad e indefensión de sus cuerpos para conquistar a los hombres. Sin embargo, la tendencia está cambiando y cada vez más los machos están prefiriendo mujeres de cuerpos firmes y representativos.