¿Por qué existen conflictos entre padres e hijos adolescentes?

La llegada de la etapa de la adolescencia en los hijos representa en el caso de los padres una situación delicada, ya en muchos...

La llegada de la etapa de la adolescencia en los hijos representa en el caso de los padres una situación delicada, ya en muchos casos los chicos se tornan rebeldes y debido a esto los padres se ven en la obligación de cambiar la comunicación, los roles habituales, la dependencia, las actividades, las necesidades económicas y todos los problemas que se puedan presentar, esto debido a que los gustos y las preferencias cambian, ya el joven no es atraído por las mismas cosas que de niño, de manera que hay que estar alerta ante tales cambio, y orientar en todo momento al adolescente.

La etapa de la adolescencia se ubica principalmente entre los 11 y los 16 años de edad, el joven se encuentra pasando de la etapa infantil a la de ser adulto

En esta etapa de transición entre la niñez y la adultez también los padres van cambiando, se dice en muchos casos que es una etapa negativa debido a los conflictos, sin embargo, no necesariamente tiene que ser vista así, hay muchos factores que influyen en que se presenten problemas graves, como lo son la personalidad del joven, el carácter de los padres, la comunicación efectiva y amorosa entre ellos, las amistades. Si los chicos están bien orientados, educados y con la atención adecuada no debería ocurrir nada fuera de lo normal, sin embargo, hay que estar vigilante.

La etapa de la adolescencia se ubica principalmente entre los 11 y los 16 años de edad, el joven se encuentra pasando de la etapa infantil a la de ser adulto, por ello entra en conflicto interno, aún depende de sus padres, pero tiene el deseo de ser independiente en todos los sentidos, además de esto posee las potencialidades psíquicas de un adulto.

Es muy común que los chicos en esta etapa quieran tener experiencias por sí mismos, jugando a que ya son adultos, como las relaciones sexuales, probar el cigarrillo, la ingesta de alcohol, desafiar a la autoridad (comenzando por los padres), y en casos más graves las drogas. De ahí se desencadenan los riesgos de embarazos precoz, enfermedades, vicios, conductas de alteración del orden público o delictivas, las cuales si no son corregidas a tiempo pueden crecer y agravarse aún más al paso del tiempo.

La base de los problemas que se presentan en los adolescentes son los siguientes:

Los modelos de madre y padre no son los adecuados. Existe el caso de que los padres no sepan poner límites.
Es necesario que los padres sepan trasmitir amor a sus hijos, así como también la confianza para que haya una comunicación fluida.
No se debe vivir a través de los hijos, sino “con ellos”.
La interacción con varias familias, y varias generaciones influye en la complejidad de la crianza.

Los padres deberán manejar la etapa de manera bien cuidadosa, dejándole ver al adolescente que tiene la libertad de salir a pasear, compartir con sus amigos y hacer sus cosas siempre y cuando mantenga una comunicación directa con sus padres, y de cuenta de las actividades que realiza y con quien lo hace.

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